LEA:
Efesios 5:15-21 | La vida se parece mucho al clima… es
estacional. Nos guste o no, tiende a pasar hacia la próxima estación. Y cuando
esto sucede, solemos vacilar e incluso temer lo que pudiera estar por delante.
Esto es especialmente
cierto en las últimas etapas de la vida, cuando nos asaltan pensamientos tales
como: ¿Me quedaré solo? ¿Estaré bien de salud? ¿Me alcanzará el dinero?
¿Mantendré mi lucidez mental? Como en todas las etapas de la vida, tenemos que
tomar decisiones: malgastar ese período con ideas atemorizantes o, como dice
Pablo: «… [aprovechar] bien el tiempo, porque los días son malos» (Efesios
5:16).
Sea cual
sea tu edad, puedes contar con la fidelidad de Dios. Él declara: «No te
desampararé, ni te dejaré». Por eso, podemos decir valientemente: «El Señor es
mi ayudador; no temeré…» (Hebreos 13:5-6).
Ya que
cuentas con la presencia y la provisión del Señor, saca el mayor provecho de tu
tiempo en todas las estaciones, siguiendo a Jesús de cerca, pasando tiempo en
su Palabra y en oración, amando y perdonando más que antes, y sirviendo a los
demás con gozo y generosidad.
Dios nos ha
bendecido con la etapa que vivimos ahora… ¡aprovechémosla al máximo!
La vida es
importante… ¡aprovéchala al máximo!
(Nuestro
Pan Diario)
No hay comentarios.:
Publicar un comentario
Nota: sólo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.