Cada día es
una bendición del SEÑOR para sus hijos, es un regalo de 24 horas. Y este es
irrepetible. Sin importar qué esté viviendo un creyente, este puede con la
ayuda del SEÑOR mantenerse alegre y disfrutar sus días. En los momentos
difíciles DIOS puede guardar el corazón y mente de los suyos para darles gozo y
disfrutar de lo que ellos sí tienen. Cualquier situación por difícil que
parezca es temporal, y se debe pasar con ese entendimiento sin descuidar a DIOS
sino convertirle en su alegría.
En la vida
que el SEÑOR concede a sus hijos existirán temporadas en las cuales por más que
se intente no se recibirá lo que se anhela, esto no significa que no se vaya a
recibir, sino que en ese tiempo el SEÑOR tiene otro propósito que será claro.
Pudiera ser descansar, escuchar, fortalecerse, sanarse, volver a creer u otro.
Cuando no se recibe lo que se espera debe uno enfocarse en lo que sí tiene en
ese momento, siendo que es muy seguro que aquello que sí tiene sea una oración
contestada de hace tiempo, pero se puede perder su disfrute por falta de
entendimiento. DIOS tiene cuidado de sus
hijos, para que estos puedan entregarle sus cargas y ansiedades. El SEÑOR jamás
defraudará a los que confían en Él.
En el “hoy”
está tu bendición. El pasado ya no existe y el futuro está en las manos de
nuestro DIOS amoroso. El SEÑOR provee soluciones para los suyos en el momento
preciso, de la mejor manera, para que ellos puedan enfocarse en Él y la
bendición del “hoy”.
Si
últimamente encuentras difícil disfrutar tus días, pídele al SEÑOR que te ayude
a identificar su propósito para estos días, al hacerlo tendrás facilidad de
alabarle con tu vida.
Cada día ofrece una bendición única,
encuéntrale al lado del SEÑOR.
Autor:
Richy Esparza
Escrito
para: Devocional Diario
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