Los campos
se secaron y se achicharraron por la falta de lluvia, y las cosechas se
marchitaban de sed. La gente estaba ansiosa e irritable, mientras buscaba en el
cielo alguna señal de alivio. Los días se volvieron áridas semanas. La lluvia
no llegaba.
Los
ministros de las iglesias locales convocaron a una hora de oración en la plaza
del pueblo, para el siguiente sábado inspirarse.
Este sábado
al mediodía, la gente del pueblo respondió en masa, llenando la plaza con caras
ansiosas y corazones llenos de esperanza. Los ministros se conmovieron al ver
la variedad de objetos que los concurrentes traían entre sus piadosas manos:
Libros
sagrados, cruces, rosarios, Bíblias.
Cuando la
hora terminó, como si se tratara de un mandato mágico, una suave lluvia comenzó
a caer. Las felicitaciones se extendieron entre la multitud, mientras sostenían
en alto sus atesorados objetos con gratitud y alabanza.
En el
centro de la manifestación, un símbolo de fe pareció ensombrecer a los demás:
un niño de nueve años había llevado una sombrilla.
Laverne W.
Hall
Hebreos
11:1
"Ahora
bien, la fe es la certeza de lo que se espera, la convicción de lo que no se
ve."
Mateo 21:22
"Y
todo lo que pidiereis en oración, creyendo, lo recibiréis."
Juan 15:16
"No me
elegisteis vosotros á mí, mas yo os elegí á vosotros; y os he puesto para que
vayáis y llevéis fruto, y vuestro fruto permanezca: para que todo lo que
pidiereis del Padre en mi nombre, él os lo dé."
Fuentes:
Renuevo de Plenitud
No hay comentarios.:
Publicar un comentario
Nota: sólo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.