En una
ocasión un visitante de Antesdelfin.com me envió una pregunta en la que me
interrogaba sobre la posición de Dios con respecto a lo que él denominaba como
"sexo anal". Pero lo más espeluznante de tener que enfrentarme a
dicha disyuntiva lo conformaba el hecho de que esta persona me decía que fue
una pareja de pastores quienes se encontraban incursionando en tales prácticas
y que inclusive se habían dado la libertad de admitir desde el púlpito lo
satisfechos que se encontraban al hacerlo. Pues hasta ahora yo había colocado
en la gaveta la engorrosa situación de tener que responder a tal pregunta, pero
ahora, dado el tema en que nos encontramos inmersos, he considerado apropiado
mencionar que tales prácticas, en mi humilde opinión, podrían agruparse bajo
prácticas que van contra "el uso natural" de los miembros sexuales
creados por Dios.
En mi
humilde opinión, creo que tanto el "sexo oral" como el "sexo
anal" (donde el hombre inserta su pene por el ano de la mujer), son
prácticas que van "contra la naturaleza". Dios inventó el sexo para
la reproducción y para proporcionar placer a la pareja unida a través de la
prescripción divina. El sexo no puede verse como un utensilio para satisfacer
los deseos perniciosos y evidentemente pervertidos de la otra pareja
recurriendo a actos que evidentemente van contra lo natural. Sea usted
creacionista o evolucionista, debe admitir que el sexo que no es reproductivo
es simplemente placentero. Pues aunque Dios no está opuesto al placer sexual
(¡fue Él quien lo concibió!), Él sí está totalmente opuesto al placer
pernicioso y liberal donde los participantes recurren a medidas claramente
opuestas a lo prescrito por Él cuando nos diseñó.
Si
tuviéramos que transar y en pos de lograr "placer sexual" tuviéramos
que admitir cualquier cosa que resultara placentera a cada persona en
particular, entonces tuviéramos que transar también en la admisión de los actos
sádicos y masoquistas, los cuales, al parecer traen gran satisfacción y
"placer sexual" a los envueltos en tales actos.
¿Dice la Biblia explícitamente que el
"sexo anal" es prohibido por Dios?
Pues no
creemos que la Biblia diga textualmente tal cosa. Sin embargo, la Biblia dice:
"Honroso sea en todos (ustedes) el matrimonio, y el lecho sin
mancilla" (Hebreos 13:4). Y aunque es obvio que la Biblia no nos dice
exactamente a lo que se refiere cuando dice que se debe mantener "el lecho
sin mancilla", es también contextual y exegético, entender que cualquier
cosa que esté contra lo "natural", según lo define el Apóstol, es
también motivo de causar "mancilla" a la cama matrimonial; esto, sin
mencionar al que se enfrasca en tales prácticas ¡fuera del matrimonio!
¿Qué dice la Biblia que sí se puede hacer en la
intimidad de la cama matrimonial?
Existe una gran cantidad de prácticas en las
que la Biblia nos deja sin instrucciones precisas. Por tanto, es difícil para
un hombre como yo, afectado por ideas preconcebidas, costumbres, entrenamiento
y prejuicios, tomar la posición de juez y decir: "Esto se puede y esto no
se puede". En esas zonas grises consideramos que es labor del Espíritu
Santo decidir. Es Él quien hablará individualmente y dará paz si lo que se
practica es "puro" o redargüirá si lo que se practica es
"impuro".
¿Nos proporciona la Biblia alguna regla general
que nos sirva de directriz?
"Todo
lo que no es de fe, es pecado". Romanos 14:23. Creemos que esta es una
regla general que nos puede guiar en este tipo y otros tipos de prácticas de
nuestro diario vivir. Si al hacer cualquier cosa (asumiendo que usted es salvo)
usted siente el toque del Espíritu de Dios, y la paz característica que sólo
estar en perfecta obediencia para con Dios desaparece, entonces, esto no es
"de fe", y por tanto es "pecado".
Dios nos ha
llamado a ser santos, como Él es santo. Dios no nos ha exonerado la santidad
para lograr la mal interpretada "felicidad" que tanto el hombre
busca. Hace poco escuché en la televisión a una pareja de homosexuales
"cristianos" decir flagrantemente que "ellos sabían que ser
homosexuales no ofendía a Dios y que no dudaban en lo absoluto de su salvación
ya que siendo homosexuales ellos eran felices, y sin duda alguna Dios deseaba
que ellos fueran felices".
En ningún
lugar de la Biblia Dios nos dice que Él desea nuestra fidelidad. ¡No! Dios sí
quiere que seamos "santos", ver Levíticos 11:44 y 45; 19:2; 20:7;
20:26 e incontables otras escrituras. Dios no es feliz. ¡Dios es Santo! Es sólo
en la obediencia total a sus preceptos donde podemos encontrar la paz que el
hombre, a través de sus propios medios, no puede encontrar. Una combinación
entre "obediencia", "santidad" y "humildad"
proporciona el terreno perfecto para lograr la paz divina. Es esa paz la que el
hombre confunde con felicidad. Si usted pierde la paz de Dios en su corazón
cuando haga cualquier cosa, eso no es de Dios y por tanto es pecado. Si al
tener sexo anal o al incurrir en cualquier otra práctica sexual, usted pierde
la paz de Dios en su corazón, entonces eso es pecado. ¡No lo haga!
no. mi Dios aborrece esa practica demoniaca.
ResponderBorrar