La Depresión es Real

Salmos 77

 1              «Al Músico principal: para Jedutún: Salmo de Asaf» Con mi voz clamé a Dios, a Dios clamé, y Él me escuchó.

 2              Al Señor busqué en el día de mi angustia; mi mal corría de noche y no cesaba; mi alma rehusó el consuelo.

3               Me acordaba de Dios, y me turbaba; me quejaba, y desmayaba mi espíritu. ( Selah )

4               Detenías los párpados de mis ojos: Estaba yo quebrantado, y no hablaba.

5               Consideraba los días desde el principio, los años de los siglos.

6               Me acordaba de mis canciones de noche; meditaba con mi corazón, y mi espíritu inquiría.

7               ¿Desechará el Señor para siempre, y no volverá más a sernos propicio?

8               ¿Ha cesado para siempre su misericordia? ¿Se ha acabado perpetuamente su promesa?

9               ¿Ha olvidado Dios el tener misericordia? ¿Ha encerrado con ira sus piedades? ( Selah )

10            Y dije: Enfermedad mía es ésta; traeré, pues, a la memoria los años de la diestra del Altísimo

 11          Me acordaré de las obras de Jehová; sí, haré yo memoria de tus maravillas antiguas.

 12          Y meditaré en todas tus obras, y hablaré de tus hechos.

 13          Oh Dios, en santidad es tu camino: ¿Qué Dios es grande como nuestro Dios?

 14          Tú eres el Dios que hace maravillas; hiciste notorio en los pueblos tu poder.

 15          Con tu brazo redimiste a tu pueblo, a los hijos de Jacob y de José. ( Selah )

 16          Te vieron las aguas, oh Dios; te vieron las aguas, y temieron; y temblaron los abismos.

 17          Las nubes echaron inundaciones de aguas; tronaron los cielos, y discurrieron tus rayos.

18           Anduvo en derredor el sonido de tus truenos; los relámpagos alumbraron el mundo; se estremeció y tembló la tierra.

19           En el mar fue tu camino, y tus sendas en las muchas aguas; y tus pisadas no fueron conocidas.

20           Condujiste a tu pueblo como ovejas, por mano de Moisés y de Aarón.

Es posible que ese compañero suyo de trabajo tan callado este deprimido. En el grupo de jóvenes de iglesia puede haber adolescentes que estén paasando por algún grado de depresión. La madre joven que acaba de dar  a luz un niño sano y despierto, puede estar sintiendo su peso. También es posible que su pastor la experimente de una forma leve, los lunes por mañana, inmediatamente después  de los momentos fuertes del domingo.

La depresión es una dolencia que el diccionario define como el estado del sentirse triste…

 (a) Desorden marcado especialmente  por la tristeza, la inactividad…

(b) sentimientos de abatimiento y carencia de esperanza.

Los investigadores afirman que sólo en los Estados Unidos hay más de veinte millones de personas que la sufren todos los años.

Los cristianos no se pueden permitir el lujo de pasar por alto el asunto de la depresión. Ante toso, es posible que n nuestra propia congregación haya personas que estén pasando por ella. Hasta es posible que nosotros mismos tengamos que enfrentarnos a ella en algún momento.

Asaf era uno de los levitas que ministraban delante del arca de Jehová, era uno de los cantores, de lo que impartía gozo, sin embargo este hombre estaba pasando por un estado de tristeza, de aflicción.

Dice que  desmayaba mi espíritu, no podía pegar; o sea no podía dormir, tampoco podía abrir su boca.

Lo bueno del asunto es que Asaf reconoció que esta era una enfermedad y reconoció de donde vendría la ayuda.

Tal vez no encontremos como Asaf y decimos ya Dios no me quiere, Dios se ha olvidado de mi, Dios no me hable, ya Dios no contesta mis oraciones, Dios me has abandonado; mentira del diablo.

Hay cosa que Dios hace que nosotros podemos verla y hay otra que no podemos verla; quizás lo que Dios está haciendo ahora en nuestra vida nosotros no podemos verla’ de una cosa si yo estoy seguro y es que Dios siempre desea lo mejor para nosotros.

El salmista Asaf nos da la técnica para salir de la depresión, a pesar de él estaba cayendo en este estado de tristeza, él mismo encontró la solución.

En el versículo 10 el asunto da un giro de 180 grado; en otra palabra el dijo no pensare mas asunto negativo, de tristeza, traeré a memoria lo que Dios has hecho en mi vida y si no ha hecho nada en mi, traeré a memoria lo que Dios ha hecho por otros.

El problema de la depresión nos afecta a todos. Por supuesto, la persona que sufre de una depresión grave necesita acudir medico. Pero también puede conseguir ayuda si acude a la Palabra de Dios y a las experiencias personales suyas o ajenas, para restaurar la sencicion de esperanza que necesita con toda urgencia.

Necesitamos captar  los principios revelados en este Salmo para poder animara a los que estén deprimidos y enfrentar así nuestra propia depresión.

Félix Abreu