Leer |
LUCAS 1.26-37 | Encuentro interesante que las personas
eligen algunas partes de la Biblia que aceptan como verdaderas. Por ejemplo, el
nacimiento virginal es, a menudo, un milagro que rechazan. El argumento que
escucho es: “Siempre y cuando yo crea en Jesús, el resto no importa”. Pero ese
razonamiento no es lógico. Sin su nacimiento virginal, Jesús habría sido apenas
otro hombre, y por tanto indigno de nuestra fe.
Considere
las implicaciones si María no hubiera sido virgen. En ese caso, lo siguiente
sería cierto: 1) Fue una mentirosa que dijo haber recibido la visita de un
ángel, quien le dijo que daría a luz al Hijo de Dios; 2) Fue infiel al esposo
que tendría y 3) Jesús era un hijo ilegítimo sin ninguna naturaleza divina. Además,
si su nacimiento virginal fuera mentira, entonces Jesús hubiera sido un loco
que decía ser el Hijo de Dios, y que murió como un mártir tratando de
demostrarlo.
En
realidad, para que la muerte de Jesús fuera expiatoria, su nacimiento virginal
tenía que ser cierto. Un niño nacido de un hombre y una mujer viene al mundo
con una naturaleza de “carne” pecaminosa (Ro 5.12), pero Dios exigía un
sacrificio perfecto que pagara por el pecado. Ese mensaje está en todo el
Antiguo Testamento (Dt 17.1). Solo Jesús, que nació del Espíritu Santo (Mt
1.18), podía pagar el castigo en lugar nuestro.
No podemos
escoger creer la Palabra de Dios a medias. Cada hecho, cada promesa y cada
principio están incluidos por una razón. El Padre celestial puso a su hijo en
el vientre de una virgen, para que nadie pudiera dudar de que Él era el Cordero
de Dios, el Salvador del mundo.
(En
Contacto)
No hay comentarios.:
Publicar un comentario
Nota: sólo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.