En Brasil
matan por la noche a niños de la calle para limpiar las ciudades y dar buena
imagen en el Mundial
Un
periodista danés denuncia que las autoridades brasileñas están haciendo
desaparecer a niños que viven en la calle para dar una “imagen limpia” durante
el Mundial de fútbol que se celebra a partir de junio.
Las
noticias de retrasos en las obras, chapuzas, revueltas sociales, accidentes
laborales y demás se han quedado en minucias al lado de la espeluznante
denuncia que hace Mikkel Jensen, periodista danés, y que ha desvelado la
revista Placar.
Jensen,
periodista freelance, soñaba con cubrir el Mundial de fútbol, “el mejor deporte
del mundo”, en Brasil, “un país maravilloso”. Pero el sueño ha mutado en
pesadilla después de que el danés decidiese viajar con unos meses de antelación
al país suramericano.
Mikkel
estuvo en Fortaleza, para él “la ciudad más violenta” de todas las que serán
sedes del torneo, y regresó impresionado. Horrorizado, más bien. Tanto que ha
decidido renunciar a ese sueño de acudir como periodista al Mundial.
Y explica
las razones en un espeluznante relato publicado en su perfil de Facebook:
“Desde hace
casi dos años y medio llevo soñando con cubrir el Mundial de Brasil. El mejor
deporte del mundo en un país maravilloso. Hice un plan, me fui a estudiar a
Brasil, aprendí portugués y estaba preparado para volver.
Y en
septiembre de 2013 volví. El sueño se iba a cumplir. Pero hoy, dos meses antes
de la fiesta de la Copa del Mundo, he decidido que no voy a seguir aquí. El
sueño se ha convertido en una pesadilla.
Durante
cinco meses fui documentando las consecuencias que provoca la celebración del
Mundial. Son varias: remodelaciones, fuerzas armadas y policía militar en las
comunidades, corrupción, abandono de proyectos sociales…
Descubrí
que todos los proyectos y los cambios se deben a gente como yo -un extranjero y
también un periodista internacional-. Estoy siendo utilizado para causar buena
impresión.
En marzo
estuve en Fortaleza para conocer la ciudad más violenta de todas las sedes de
la Copa del Mundo. Hablé con algunas personas que me pusieron en contacto con
niños de la calle y luego supe que algunos habían desaparecido.
A menudo,
los matan por la noche, cuando están durmiendo en una zona donde hay muchos
turistas. ¿Por qué? ¿Para dejar limpia la ciudad para los extranjeros y la
prensa internacional? O sea, ¿por mi culpa?
En
Fortaleza conocí a Allison, 13 años, que vive en las calles de la ciudad. Un
chaval con una vida muy dura. Él no tenía nada, sólo un paquete de cacahuetes.
Cuando nos conocimos él me dio todo lo que tenía, los cacahuetes.
Este niño,
que no tiene nada, ofreció la única cosa de valor que tenía a un extranjero que
llevaba cámaras por valor de 10.000 dólares y una tarjeta Master Card en el
bolsillo. Increíble.
Pero su
vida está en peligro debido a gente como yo. Corre el riesgo de convertirse en
la próxima víctima de la limpieza que están efectuando en la ciudad de
Fortaleza.
No puedo
cubrir este evento después de enterarme de que el precio de la Copa no sólo es
el más alto de la historia en dinero, sino que estoy convencido de que ese
precio incluye también las vidas de niños.
Hoy voy a
volver a Dinamarca y no volveré a Brasil. Mi presencia sólo está contribuyendo
a un desagradable espectáculo en Brasil. Un espectáculo en el que hace dos años
y medio soñaba participar, pero hoy voy a hacer todo lo que esté en mi mano
para criticar y dar a acoocer el precio real de la Copa del Mundo de Brasil.
¿Alguien
quiere dos entradas para el Francia-Ecuador del 25 de junio?
”Y firma
Mikkel Jensen, periodista danés independiente y corresponsal en Río de Janeiro.
Jensen, por
razones obvias de seguridad personal, pidió que esta noticia no se publicase
hasta que él hubiese salido de Brasil y regresado a su país.
Fortaleza,
la ciudad donde según el periodista danés se matan niños de la calle, acogerá
seis partidos del Mundial en su flamante y remodelado Estadio Gobernador
Plácido Castelo.
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