Leer |
ROMANOS 8.6 | Muchos creyentes pueden completar casi instintivamente esta
declaración: “Porque la paga del pecado es ____”. Al leer esta frase, usted
quizás llenó el espacio en blanco diciendo en voz alta: muerte. Todos sabemos
lo que esto significa, ¿verdad? Romanos 6.23 proclama que eso es lo que
merecemos por nuestro pecado. Así es como nos vemos a nosotros mismos de vez en
cuando —como pecadores que escapamos de una muerte horrible.
El problema
aquí es que muchos creyentes recuerdan solo la primera parte del versículo —la
parte que tiene que ver con nuestro pecado. Si nos enfocamos en el pecado y no
en el plan de Dios para la restauración, entonces toda nuestra perspectiva
espiritual se desequilibra. Hacer hincapié en el pecado dirige toda la atención
hacia lo que hemos hecho, a cómo hemos actuado, a lo que hemos sido. Este
egocentrismo nunca llevará a la tranquila seguridad de la salvación que el
Señor ha dado. Cuando nos enfocamos en nosotros mismos, dejamos poco espacio
para Dios.
Romanos 8.6
es un buen acompañante del que hemos estado viendo, porque el Señor no quiere
que nos enfoquemos en nuestro problema, sino en la solución que Él da.
Es que
Romanos 6.23 no es simplemente una condena por el pecado; ¡es un anuncio de
salvación! El apóstol Pablo nos recuerda que Dios vio nuestra terrible
situación, y tomó la iniciativa de salvarnos. El Padre celestial nos ha dado
misericordiosamente la salvación como una dádiva. Y cuando el Señor nos da un
regalo, no hay nada que pueda robárnoslo (Ro 8.35-39). Esa es la seguridad que
nuestro Dios quiere que tengamos.
(En
Contacto)
No hay comentarios.:
Publicar un comentario
Nota: sólo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.